
El mismo consiste en una obstrucción del flujo sanguíneo al cerebro y pérdida del funcionamiento cerebral en alguien que haya consumido la droga denominada cocaína.
La cocaína es un producto de la planta de coca y es una droga psicoactiva ilegal. Es un potente estimulante que incrementa la actividad del sistema nervioso central y de los nervios que se desprenden de la médula espinal (sistema nervioso periférico).
El consumo de cocaína puede causar muchos problemas médicos. El accidente cerebrovascular secundario al uso de cocaína probablemente ocurre debido a que la cocaína provoca el estrechamiento (constricción) de los vasos sanguíneos, mientras aumenta igualmente la presión arterial (hipertensión). Dicha vasoconstricción puede ser tan severa que reduce o bloquea el flujo sanguíneo de las arterias en el cerebro. El consumo de cocaína puede llevar a que se presente hinchazón (inflamación) de las arterias cerebrales.
El accidente cerebrovascular relacionado con la cocaína es más común en hombres menores de cuarenta años y entre los riesgos está un antecedente reciente de consumo de esta droga.
Unas cuantas personas que experimentan un accidente cerebrovascular después de consumir cocaína tienen una malformación arteriovenosa, que las hace más propensas a padecer dicho accidente. En estos casos, el accidente cerebrovascular se debe al sangrado cerebral y no a la disminución del flujo sanguíneo.
Los síntomas de un accidente cerebrovascular abarcan:
- Somnolencia, letargo o pérdida del conocimiento
- Pérdida del equilibrio o la coordinación
- Pérdida de la memoria
- Cambios en el estado anímico
- Entumecimiento, hormigueo, disminución de la sensibilidad
- Cambios de personalidad
- Lenguaje enredado, incapacidad para hablar o entender el lenguaje, dificultad para leer o escribir
- Dificultades para deglutir o babeo
- Movimientos oculares incontrolables o caída de los párpados
- Vértigo
- Cambios en la visión
- Debilidad o parálisis de un brazo, pierna, lado de la cara o cualquier parte del cuerpo
La persona también puede presentar signos de otros trastornos que ocurren con el consumo de cocaína.
El tratamiento puede incluir no sólo el accidente cerebrovascular sino otros trastornos que puedan resultar del consumo de cocaína.
Posibles tratamientos:
- Amantadina para reducir el riesgo de tomar drogas nuevamente
- Medicamentos agonistas de la dopamina para la abstinencia de cocaína
- Medicamentos para tratar los ritmos cardíacos irregulares ( arritmias)
- Sedantes, como el diazepam y el midazolam, para reducir la agitación y las dificultades para dormir (insomnio)
Debido a que la mayoría de los adictos a la cocaína también son adictos a otras drogas (como el alcohol o la heroína), también se deben tratar los síntomas de abstinencia de estas drogas. Los pacientes que utilizan metadona para la adicción a la heroína deben continuar recibiendo la dosis regular.
A menudo, el pronóstico es desalentador, en especial con el consumo prolongado de cocaína. Se puede presentar la muerte si dejan de funcionar apropiadamente muchos sistemas corporales.
Fte: MedlinePlus

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