¿Qué diablos le habrá pasado a Wilton?. . . ¿Se habrá ido tan pronto al zafacón de la historia?

CD.- Pero bueno, ¿qué será de Wilton Guerrero, que ya no dice nada, que ha desaparecido de las primeras planas como si se lo hubiese tragado la tierra, que se ha ocultado en el misterio, que no insiste en denunciar la podredumbre que afecta todo el entretejido del Estado.

Ni encabeza marchas ciudadanas porque se haga justicia, ni refleja el sentimiento público contra los que apañan a la gran delincuencia, ni exhorta a la movilización de las conciencias, ni enfrenta la hipocresía de la alta burocracia, ni alienta las aspiraciones de un cambio necesario?

¿Qué habrá sucedido, que hasta nos ha puesto a dudar de que él sea el “loco” iluminado que necesitábamos?...

¿Qué diablos le habrá pasado a Wilton? ¿Será que le impusieron o le compraron el silencio? ¿Será que lo convencieron de que sus denuncias no tenían sentido o “dañaban” al partido?

¿Será que se rindió ante el poder transitorio de un gobierno, olvidando que el país debe existir más allá de un cuatrienio? (Wilton…¿Se habrá ido tan pronto al zafacón de la historia?).