SANTO DOMINGO (R. Dominicana).- “Estoy mudo”, fueron las únicas palabras pronunciadas por el fiscal del Distrito Nacional, Alejandro Moscoso Zegarra, al ser entrevistado sobre las investigaciones en torno al caso Figueroa Agosto.
No obstante, en el Palacio de Justicia de Ciudad Nueva lo que se observa es a una fiscalía apresurada, ante la obligación de presentar formal acusación contra los involucrados en el caso a más tardar el 7 de junio.
“No tengo nada que hablar. Estoy mudo”, respondió el fiscal ante preguntas de reporteros de 7dias.com.do, cuando se paseaba por los pasillos del Palacio de Justicia.
Esta semana, Moscoso Zegarra ha acelerado los interrogatorios a personas que podrían estar relacionados con el caso, que involucra al puertorriqueño José David Figueroa Agosto y la dominicana Sobeida Félix Morel, ambos prófugos.
El lunes pasado fue interrogada Madelyn Bernard, esposa del ex coronel José Amado González González, asesinado el 24 de diciembre del 2009 a la llegada a su residencia en el sector Bella Vista, en esta capital.
Mientras que el martes le tocó el turno a la conductora de televisión Dolphy Peláez, hermana de Mary Peláez, detenida en la cárcel de Najayo bajo la imputación de ser testaférrea de Figueroa Agosto.
Para este miércoles la fiscalía programó el interrogatorio a dos ejecutivos del complejo turístico Ocean One, de Cabarete, Puerto Plata, donde Mary Peláez adquirió un apartamento, a un costo de 620 mil dólares, cuya propiedad real es atribuida a Figueroa Agosto.
Los ejecutivos son Pierre Dardelet y José González, este último administrador de Ocean One.
“Yo entiendo que la Fiscalía perdió mucho tiempo en la investigación. Todo eso debieron de hacerlo antes, para que ahora no estén apresurados”, dijo el abogado de la familia Peláez, José Rafael Ariza. 7D

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